El músico canario se confiesa un aficionado a los toros y así lo revela el rincón taurino de su casa. / PEDRO CARRERO

Ha creado su espectáculo, 'Lo mejor de los mejores', impulsado por una clara razón: «La que está cayendo». Caco Senante se explica: «Ante la situación caótica y difícil que está viviendo la música, una de las esperanzas que tengo y que creo firmemente que puede ser una salida es la recuperación del valor de la música en directo, algo que se ha devaluado».

Un año y medio lleva el cantautor rodando 'Lo mejor de los mejores' por la geografía española y también por el extranjero. Un espectáculo que viene a continuar una trayectoria musical dibujada con 13 discos y también una propuesta con visos de convertirse, «cuando pueda ser», en disco.

Bajo un mismo título, Caco Senante pone voz a los temas que un día crearon 12 artistas de talla muy alta: Carlos Gardel, José Alfredo Jiménez, Silvio Rodríguez, Joaquín Sabina, Pablo Milanés, Armando Manzanero y Joan Manuel Serrat, entre otros.

«Comienzo diciendo que me llamo Caco no por casualidad, sino porque soy un ladrón de canciones. El espectáculo no deja de ser un reconocimiento al talento de los compañeros, aparte de un desarrollo de mi insana envidia».

Leyendas

Los temas que interpreta van acompañados por la narración de pasajes de la vida y anécdotas de cada uno de los protagonistas. «En el espectáculo explico por qué cada uno es leyenda. Carlos Gardel, porque todo lo que se puede contar de él puede ser verdad y puede ser mentira. Serrat, porque es el espejo donde todos los que escribimos canciones nos miramos. Silvio Rodríguez, porque es el más surrealista a la hora de componer. Manzanero, porque tiene la obra romántica más contundente, aunque pienso que las mejores canciones de amor de los últimos 30 años son las de Pablo Milanés».

Desde el 24 de mayo hasta el 29, Caco Senante ofrecerá 'Lo mejor de los mejores' en el Pequeño Teatro Gran Vía. «Lo veo como un premio, porque este año cumplo 30 años de profesión».

A su pasión por la música se suma un segundo amor: el mundo de los toros. Y así lo revela el rincón taurino que ha creado en su casa. «He tenido la fortuna de conocer el mundo de los toros de una manera diferente, en el sentido de que no soy simplemente un espectador que se sienta en el tendido sino que he tenido la posibilidad de convivir con la gente de la profesión y eso me ha posibilitado tener una visión diferente de la fiesta». Un rincón presidido por algunos cuadros de orígenes muy distintos. «Uno lo he comprado en El Rastro, otro me lo regaló Joaquín Sabina, otro es un cartel pintado por Rafael Alberti con motivo de la reaparición de Luis Miguel Dominguín...».

Su afición a la pintura también está patente. «Por desobediente, porque Sabina un día me dijo: 'No se te ocurra comprarte un cuadro nunca porque el día que te compres uno, entras en la espiral y es una ruina'».

Entre sus objetos más queridos destaca la colección de CD que reúne su etapa profesional del vinilo (del 76 al 92) y que le regaló su hermano José María; una foto de él con su hijo Carlos; y una fotografía con Yasir Arafat. «Es uno de los momentos importantes de mi vida porque tuve la posibilidad de conocer a un gran hombre».